Craziness beyond frontiers

Sunday, June 01, 2008

“O que mais vale a pena é estar vivo”...(*) Four and Endless..


'There are people out there who will not read books, but somehow they'll read my books. They serve them in a way most fiction doesn't. I give them a less filtered form of entertainment. I acknowledge some unacknowledged parts of our lives, which, as a culture, we don't tend to talk about.'
--Chuck Palahniuk

"Writing, then, has become not just a way for Chuck to confront his fears, but a means to escape into a world of play".
"Fright Club", The Observer/Inerview, Sunday, May 8,2005.


E apesar
Do tráfico, do tráfego equívoco,
Do tóxico do trânsito nocivo;
Da droga do indigesto digestivo;
Do cancer vir do cerne do ser vivo;
Da mente, o mal do ente coletivo;
Do sangue, o mal do soropositivo;
E apesar dessas e outras,
O vivo afirma, firme e afirmativo:
“O que mais vale a pena é estar vivo”...


La última vez que estuvimos juntos. Esa vez en que apenas habíamos quedado para tomar un café y de la nada y a partir de un cruce de comentarios triviales terminamos nuevamente en el departamento, no se puede catalogar de otra manera que “memorable”, además de “extremadamente frugal”.

Y es que a más de follar, nos supimos entregar con displicencia el uno al otro en el pasar de las horas. Supimos darnos los tiempos para leer cuentos de Chuck Palahniuk/Error Humano y Juan Martini/Rosario Express, mientras escuchábamos Mithology de Patricia Barber, Cosas Mías, de los Abuelos de la Nada, y también algo de El Azote, banda undergruond de Aguascalientes, y a propòsito tambièn algo de La Revoluciòn de Emiliano Zapata.
Se podría decir que supimos esa vez, ser algo más que dos personas en implícita complicidad para cancelarse el uno al otro recíprocamente en sus soledades.

Afuera, mas visualmente, que otra cosa, ese viernes de finales de Junio se nos iba escapando por los ventanales. Con el correr de las horas, todo se fue desenfocando un poco más, el perfil de los edificios, el imponente perfil cordillerano del fondo, y también el perfil del cuerpo de Sonia.
De mis escritos no hablamos nada, a pesar de que fue el argumento utilizado por Sonia para reencontrarnos. Ya vencidas las lecturas, no teníamos por qué apelar al encendido de esa lamparita de escritorio que desde el piso iluminaba nuestros ires y venires al cuarto de baño contiguo, cuando las necesidades apremiaban.

Ninguno de los dos estaba realmente convencido de tener necesidades. Incluso, nos lo preguntamos el uno al otro repetidas veces: “¿Sonia, necesitas algo?”, “¿Capullìn, se te ofrece algo?, y ambos cada vez, apenas alcanzamos a negar con un gesto, a la manera en que cada uno sabia gestualmente negar con cortesía. Nos dejamos estar el resto de la tarde, irradiados solamente con la incandescencia de las secuencias graficas de la pantalla del Windows Media Player.

En algùn momento, le pedì a Sonia: "A ver borboleta, ¡èchame la suerte!". Ella me hizo un gesto de fastidio, pero se levantò del colchòn resuelta y lanzando una metralla pudorosa: "¡No me mires las nalgas!, ¡sì, tengo estrìas, ¿y què?!, ¿acaso no te enteras que a tì cada dìa se te nota màs lo loco?.

"Bueno, bueno, no te verè las nalgas, anda, èchame la suerte", le repliquè sin ganas. Ella, intentando inùtilmente con la palma de una mano taparse todas los accidentes dermatològicos de la gran topografìa de su culo, - ¡no hay poto que dure cien años! - se agachò contra la pantalla de la laptop para revisar en la atiborrada memoria musical del disco "C" y optar de entre los archivos de la carpeta: "Mùsicas_Holland_'08".

Y ya allì, y desde allì, desramificarse y desramificarse de clikc en click en click hasta llegar a alguna mùsica en la subcarpeta al final del entramado clasificatorio, y luego, darle unos golpecillos al mouse pad, que se traducìan en un trazado loco de la flechita sobre la pantalla y "a la suerte del saltar de las pelotitas dentro de la tòmbola", dar el "lucky ringing bell".

Se volteò a mì preguntàndome: "¿Listo guardanapo?". "Dale gravata", le contestè. Y apretando los pàrpados fuertìsimo, como quien espera el estallido de una olla de presiòn llena de frijoles parados, pero, tambièn delicadamente, tocò el mouse pad, y plin!!!!:

"La ciudad devoradora que canta canciones/a la nena despierta en el balcòn, morirà/yo quiero ver, voy con hambre, voy con prisa.

Ella me espera a la salida para tomarnos un cafè/y meditar sobre pequeños pasatiempos/yo guardo su foto en una caja de fòsforos./Voy vestido de negro a la tierra prometida ..de los ojos brillantes...(Ysi me va bien), prometo casarme con vos...Llovìa en Buenos Aires, la lluvia se hizo en Buenos Aires..."


¡¿Y eso tan "sadomasoporno" que era?!, preguntò Sonia, al finalizar la canciòn.

Yo no conteste, -el adjetivo era robado de un libro de Laiseca, que habìa quedado muy a la vista en los estantes del armario que estaba junto a la puerta -.

Me quedè en la màs còmoda impavidez, cerrè los ojos, sonreì, recordè otras temperaturas en otros tiempos con otros olores, recordè noches irrecordables y volvì a sonreir, quise recordar otras caricias, no pude, solo recordaba algo asì como el color del viento, o el olor de un tiempo ìdo.

...para ese entonces, ya habìa empezado a evocar todos mis recuerdos solo metafòricamente...como retrucàndolos...quizà por aquello de reconstruir otro "self"..uno distinto...sabìa que mi constructo personal estaba cimentado en la "palabra"...que yo vivìa atrapado en el "verbo", y desestructurarse a partir de la ficciòn cimentada en el verbo implicarìa empezar a hablar en otro idioma, lo cual, me hacìa seriamente considerar, viajar en algùn momento a internarme al seno de una tribu centro-africana o amazonica que dialogara en un lenguaje tribal que en nada tendrìa que ver con el lenguaje de mis percepciones aprehendidas, y quedarme allì con ellos hasta poder olvidar totalmente el castellano, el ingles y el poco portuñol que cada dìa me gustaba màs... y solo volver por sì acaso y sì solo sì lograba empezar a pensarlo todo de nuevo en ese otro lenguaje...no, dije mal, no pensar, sobre todo sentir....para ello, era imprescindible ya no generar mas afectos disruptivos de este lado, afectos condenados a ser insalubres despuès de un tiempo, afectos a partir de un self "mal ficcionado"...determinìsticamente enfermo....

....divagaba, deliraba, nada nuevo para mì...quizà sì, quizà cada dìa me parecìa màs a un tipo cada vez màs loco...làstima, loco, pero inocuo, pensè ademàs...excepto para sì mismo, repensè...basta!!!!...ahhh!, basta de pensar!!!, todo un kamikaze...ardiò por fin, el loko kamikaze!!!...tununununtun...

De pronto sentì que Sonia me pellizcaba el antebrazo y la escuchè apuràndome a decirle algo relacionado con la canciòn. Yo simplemente murmurè: "era El Ciclista Sonia". Luego, agreguè, queriendo con ello atajar la siguiente pregunta: "algùn otro dìa te dirè màs".

"El ciclista" repitiò Sonia. "Ok, me quedarè con "the bike rider", suena mejor y ademàs se parece a "the paperback writer"".

"Como quieras pipoca, como quieras", murmurè con un largo suspiro.

Luego me quedè pensando en el pequeño muelle abandonado en el embarcadero de Quilmes y en el Rìo de la Plata, y en que nosotros, Sonia y yo solo eramos "cuerpos flotando a esa hora".

Lo ùltimo que recuerdo es haberme quedado dormido sobre el vientre desnudo de Sonia escuchando un tema de la autorìa de Lenine & Carlos Rennò: "Vivo (*)".

Despertè recièn ya entrada la madrugada, Sonia se habrìa marchado hace mucho rato. Se habìa dejado un arete y el calzòn. Todo estaba bien, nadie dependìa afectivamente de nadie, todos ya, "nos habìamos sacado las madres". Volvì a dormir.

Zè B!!!, Santiago, Marzo 2008.

Vivo

autores: Lenine / Carlos Rennó

Precário, provisorio, perecível/Falível,transitório,transitivo/Efêmero, fugaz e passageiro:/Eis aqui um vivo /Eis aqui um vivo Impuro, imperfeito, impermanente/Incerto, incompleto,
inconstante/
Instavel, variável, defectivo/Eis aqui um vivo/Eis aqui/E apesar/Do tráfico,do tráfego equívoco,/Do tóxico do trânsito nocivo;/Da droga do indigesto digestivo;/Do cancer vir do cerne do ser vivo;/Da mente, o mal do ente coletivo;/Do sangue, o mal do soropositivo;/E apesar dessas e outras,/O vivo afirma, firme e afirmativo:

“O que mais vale a pena é estar vivo”

Não feito, não perfeito, não completo,/Não satisfeito nunca, não contente,/Não acabado, não definitivo:/Eis aqui um vivo/Eis me aqui...


1 Comments:

Anonymous Anonymous said...

qué bueno!!!
delicioso
lo volveré a leer!!!

bartlett? west wing??

12:42 AM  

Post a Comment

<< Home