Dentro de los Paràmetros de Normalidad del Contexto!!!

Ni el Mandi (bulìn), ni el Manga Chuca, ni el Zanate, ni el Mounstròn, habìan asistido nunca a una sesiòn de psicoterapia o se habìan cuestionado la idea del amor.

El Profeta Agapito irradiaba su luz de 33 años años de insight al servicio de un sentido vital.

El Mandi, armado hasta la mandìbulina y el Monstruòn, alcoholizado y esnifado hasta su màximo estado de gracia, seguìan a la barra, tomando micheladas solo para acomodar el guaro y una resaca que no terminaba de ser resaca en su traslape con la intoxicaciòn.

Era asì, es asì, Manga Chuca anda matando gentes en su delirio, y el Chino le atiende las alucinaciones y luego llama a parientes de los difuntos, solo en el divague de Manga Chuca, para dar pèsames imperecederos, sentenciosos, conmiserabilìsimos y prudentemente compungidos.

El Zanate atiende instrucciones de sus mayorales, pretende un ascenso de bengala perdida en el escalafòn de la mara, 14 añitos, solo tiene que ir, enchufar el cañòn a la sien del transeùnte, gatillar, y asì ser ungido con otro tatuaje màs, y en la impresiòn cutànea, evidenciar una muerte màs, que implica una cuota de crèdito sanguinario màs, algo de respeto, y derecho a mandar màs que obligaciòn a obedecer.

Sin Dios, sin Ley, y sin hambre, solo por el gusto de...por el gustillo ese, àcido, amargo, omnìvoro, de estarse sintiendo vivìsimo, avivado, y consecuente con la inconsecuencia, por supuesto, y con la razòn de ser, para cada quien.

El Mandi, dìgase, dicen que dicen que es asesino, nadie dice nada de lo que dicen, pero todos se lo notan en la cara, Mandi no habla pero su mirada intimida, tiene ese no sè què del prototipo del matòn serial cinematogràfico, y basta con verle la cara, el resto es inmundicia adosada a una presencia, no desluce, pero huele, hiede, expele un olor a algo, como un sulfuro, como un fosfato, quizà solo un olor a quemado - ¿a polvo?, ¿a pòlvora? -, a una igniciòn inminente, a un pistola siempre martillada.

El Monstruòn sufre, y lo sabe, y aniquila el sufrimiento a tucùn, un octavo de Tatascàn, dos, una raya, un Beltmont Ligth y punterìa, mucha punterìa, para acicalarse en sì mismo, aterido de un frìo que le viene de adentro, del pecho, de màs adentro del pecho, de otro sitio, del pecho endurecido de un zopilote muerto.

El Profeta Agapito habla desde el espìritu que lo convoca, se le arrima a uno y se le arrima al alma de uno directamente y sin tocar tablita, està consagrado, es hombre de acciòn, vive en la fè.

En el àgape de almas convocantes del Profeta Agapito, hay una sola Ley, y muchos dioses, cada uno tiene el suyo, y cada uno desde la complejidad delincuencial de sus maquinaciones, lo entiende a su manera, hay hostilidades por supuesto, pero hay un silencio virtual en consenso.

Acà nada es broma, todo es contundentemente mortal, en cualquier momento y en cualquier esquina matan a alguno, y allì queda el cuerpo, para la pericia respectiva, solo si hay ganas, pero antes, solo si hay necròlogo, pero antes, solo sì el interès morboso de un deudo llega al punto de la negligencia.

No hay tiempo para enamorarse, menos para desenamorarse, acà las mujeres no son mujeres, son hembras, y como tales exigen y defienden su derecho de ser saciadas por el mejor, textualmente "el mejor" postor, no hay mitologìa ninfomanìaca ni agresiones psicològicas propiamente tales, solo complacencia violenta y pa' lante, a pesar de sortear una panzota de birrias, y quizà siempre por eso, a bocajarro por detràs, pero no necesariamente sodomizando.

P0r supuesto, alguna vez alguno pierde la cabeza por un par de nalgas mulatas, de esas brillantes, que parecen untadas con manteca de chancho, pero que se autoemulsionan de su propia grasa, quizà eso no sea propiamente enamorarse, pero hay que ver que tambièn puede ser fundamentalmente adictivo, enfundarse un par de nalgas de esas criollas, con olor a pedo y mucho pellejo y misteriosamente sin estrìas.

¿La jungla mi amor?, no, calma, dentro de los paràmetros de normalidad de ¿la jungla?

La jungla y su estètica de lo apetecible, la jungla y su estètica de lo machuno, y su estètica embrionaria de lo fornicable.

No es como allà, donde la domesticaciòn neurotiza, donde los còdigos conductuales y relacionales convocan a un perpetuo baile de disfraces.

El que quiere coge, como puede, pero coge con alguna, la que quire coge, y no cuestiona si se deja coger porque sì o porque le conviene coger con este o con el otro, solo coge, y coge bien, con gusto, con ese gustillo de años de crimenes y encamamiento fortuito, con olor a polvo, a pòlvora hùmeda.

Muy improbablemente el Zanate estè interesado por coger, quizà solo y fundamentalmente por instinto, quizà coger no le interese tanto como matar, porque coger es como un asesinato a medias siempre, y matar es como coger eternamente, bang!, un penetròn definitivo a los sesos!, te preñè las ideas a fuego cabròn!

Mandi, de cuando en vez, taciturno, el Monstruòn, algunas noches "precioso", en las bartolinas màs pròximas al desarreglo pùblico de la fecha, inofensivìsimo para todos, solo letal para consigo mismo, es asì, quizà algùn dìa toque fondo y se redima y se perdone, lo queremos, lo añoramos sobrio, yendo de tropicalìsimo saco y corbata a los Juzgados, haciendo diligencias jurìdicas, soñàndose querido y creyèndose querible, amamantado de una vez por todas y no destetado y con miedo a pedir permiso, perdòn y tambìen misericordia, vale màs, es màs certero, tomarse la vida por encargo, que apostar a sentirse querido.

Igual Mandi es Mandi y nadie lo echarà de menos, nunca se sabe, es un tema de proximidades, de aproximaciones al alma.

El Pastor, el Abogado, el Doctor, el Arquitecto, el Ingeniero, postìtulos mediante, pagan al cuidacarros, viven en Colonias con guachimanes amachetados y conducen Four Runers y Pathfinders, acà no cabe la displicencia, todos a merced de todos, y màs aùn a merced de las insaciables ìnfulas de poder jeràrquico de el Zanate.

Pero igual, el Arquitecto estafa al Ingeniero, el Abogado al Pastor, todos estafan al fisco y el fisco los jode de alguna manera, o los funcionarios del fisco los joden a mordidas en las aduanas.

El Profeta Agapito acoge en su seno el desconsuelo de todos, pero no a todos simultaneamente les llega la hora, la hora de cada quien es la de cada uno, y cuando el reloj marca las seis de la tarde, los congregados de la desesperanza asisten, se asisten, se toman de las manos, se escuchan, guardan silencio, unos comen semitas y otros chupan bombones, es una cuadrilla de niños pelacables de mentes velocìsimas y maquinaciones ingobernables.

Manga Chuca matò bolo a otro, esta tarde a la abuela materna del Monstruòn, el Monstruòn ni se inmuta porque tampoco se entera, y aunque se enterara estarìa màs ocupado en pensarse acomodado en un nuevo par de nalgas brillantes, solo el Chino se las cree, probablemente solo cuando tambièn està sobrio.

Luego, hay psiquiatras, faltaba màs!, hasta un Cardenal hay, y mucho clero secular.

Donde todo el pàramo es un cementerio, Pedrito andarìa a gusto, a puro gusto literario.

Despuès de todo, y cognitivamente lo salvajemente salvìfico es darse cuenta de estar acà, lo demàs son inùtiles pendejadas, idealizaciones infames de otro bloque de pasado, allì, allà, donde todo es siempre antes analizable y solo luego perpetrable, donde se debe estar bien por sobre todo, sin remilgos y sin resabios, sin lugar a dudas, y màs allà de la confusiòn prevaricadora, ay de aquel que la confiese!, serà mal visto por los de su casta provincial, condenado x vulnerable, pero acogido en militante solidaridad por los que entienden que es solo el trànsito por una estepa del camino hacia la ansiada decencia programàtica del que piensa con la cabeza frìa, y se piensa sintièndose, y se siente pensàndose en el valor del dìa de la unidad tributaria y la de fomento, y del comportamiento de la bolsa, y del ipc acumulado del trimestre, y de lo conveniente y lo inconveniente de culear a destajo, con este o aquella, màs allà de las ganas, màs allà de los rituales, màs allà de las ineficiencias del sistema de la locomociòn colectiva.

Acà, el Poeta, se mira al espejo el gesto maniàtico, y se dice: que hijueputa que sos!, estàs loco!, tan tremebundamente enfermo, humeante de enfermo: ¿que querès?, ¿la querès volver loca?, dejala en paz!

NIÑEZ DE MARALE ATRAPADA EN LA MISERIA
Niños tolupanes que huyeron de los temblores, hace 53 días, siguen sin apoyo del gobierno. Hay enfermedades y no hay alimentos. […]
MISQUITOS HUYEN POR TEMOR A MARAS
Tegucigalpa. Más de 250 misquitos se han visto obligados a abandonar sus residencias en la colonia Las Palmas, en la capital, luego de recibir amenazas de miembros de maras. […]
A 14 ASCIENDEN LAS VÍCTIMAS POR DENGUE HEMORRÁGICO
Tegucigalpa. El dengue aún no se cansa de provocar luto en las familias hondureñas. La Secretaría de Salud ha certificado una muerte más a causa de la enfermedad. […]
A pesar de que Salud afirme que la frecuencia semanl de casos ha venido disminuyendo, a los hospitales siguen ingresando pacientes afectados. Según datos oficiales, a la fecha se reportan 26.539 casos de la variante clásica y al menos 1.503 del tipo hemorrágico. […]
20 MIL ARMAS HAN SIDO ROBADAS
Tegucigalpa. Unas 20.000 denuncias de robo de armas han sido interpuestas en las oficinas de Registro Balístico a nivel nacional, lo que resulta sospechoso, ya que se puede tratar de una estrategia del crimen organizado para utilizarlas en sus fechorías y evitar ir a prisión. […]
DEPORTADOS DENUNCIAN MALTRATOS EN RETORNO
San Pedro Sula. Con sus sueños destrozados llegaron ayer 75 compatriotas deportados de EE.UU.
Cansados, con sus ropas sucias, los catrachos [hondureños] contaron su mala suerte en el aeropuerto sampedrano.
“Tenía diez años de residir en EE.UU., allá quedó mi esposa y un hijo. Hay una discriminación terrible actualmente y sin justificación, sólo notan que uno es latino y lo atrapan” […]
ENCUESTA REVELA ÍNDICES DE INSEGURIDAD
Tegucigalpa. La inseguridad que vive la población y la falta de efectividad de la policía fueron plasmadas en una encuesta que presentó ayer el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos. 91% de los hondureños entrevistados considera que falta mayor vigilancia policial en los barrios y colonias de todo el país. […]

Fuente (veritas, de veritas): http://miguelmie.wordpress.com/